Llénese de energía en este tiempo Covid 19
No espere que su mente esté clara y serena, llévela a ese momento, sea flexible y receptiva, fuerte y equilibrada, positiva y motivada. Llénese de energía pero canalícela siempre en pòsitivo para ti y quienes te rodean, este tiempo es de “telita de cebolla” como decía mi abuela Chana.
La receta es válida para todos los sexos y preferencias, es humana. El método es obligarse a tener un momento como ese, ¿cómo?, mirando un árbol, dándose aunque sea un segundo de reflexión en esa mirada vacía y lejana – a veces sin querer -. Lo provechoso, es meditare, en lo cual especialistas difieren o complementan, concentrado en la respiración, en oraciones, canciones en la mente, palabras de versos que recuerde, silencios e inmovilidad… un tiempecito a solas consigo mismo.
Este tiempo Covid 19 dice algo bien fuerte y claro, somos humanos, estamos en “peligro pandemial” y depende de nosotros en primer término. Más que planificar qué hiciera es qué hago ahora con lo que me ha tocado vivir, cómo vivir éste momento, como no perderse en el intento.
Hasta lo bueno se acaba; así que este tiempo también acabará con fe o sin ella; mejor con fe porque la fe otorga esa resiliencia capaz de pasar un “vendaval” como éste, donde salva el amor y la solidaridad, junto con la precaución de cuidarse Ud.
Todos somos uno, y cada uno es un admirable, está en paz con la vida y ésta fluye a través de ello. La vida es en su totalidad cambio y apoyo, fluye a través nuestro con la entereza de los recursos acopiados en experiencias, vivencias, el compartir ideas o ir aprendiendo juntos, en poco o mucho espacio de confinamiento, trabajo o experiencia en pos del servicio al otro.
Cada uno es jubiloso y libre, como la vida misma, en su propia armonía, consigo mismo y con los demás, sin creer en el calendario, es un ir hacia adelante con los ojos al amor, alegría o creatividad potenciadas de una idea personal o grupal.
Hágase cargo de su vida, espontáneamente despréndase de todo aquello que no necesite, depúrese de la toxicidad ajena, si no le necesitan o no le piden ayuda.
Renuévese aquí y ahora, de conceptos nuevos, vitales; con la mira de la experiencia (para eso es el pasado) o los sueños (para eso es el futuro), la vida es simple, sencilla – no lo tome a mal… bien dice el sabio que esa conciencia humana, ese raciocinio entregados desde el mundo animal nos hizo complejos…
Líbrese de la carga mental, ocúpese o preocúpese según le sea posible, en su impulso e intuición natural con facilidad, alegría, ánimo. Perdone, tolere, compadezca, bendiga o agradezca… no se quede con nada; de lo que le gustaría recibir…
Fluya, escúchese, en cuerpo y mente… ejercítelos también, comience por cansarse en algo útil y descansar mejor…
Llénese de energía, fluya con la energía de la vida, natural, sencillamente como el día…